Alain Garaigordobil Jimenez

"No. Try not. Do... or do not. There is no try."

Yoda

No hace mucho tiempo era una de esas personas que pensaba que los triatletas estaban locos de remate, y que lo que hacían no era bueno para la salud. A día de hoy entreno 6 días a la semana y he disputado los puestos delanteros en la categoría Sub23 en distancia olímpica y sprint. Cuantas vueltas da la vida ¿no crees?

El triatlón llegó a mi vida de pura casualidad, nunca me había planteado siquiera correr una carrera popular. Toda la vida he practicado deporte, excepto 4 años en los que me centré en la música. El primer deporte que conocí fue la natación. Empecé a competir muy de joven, allá por el año 1997 (año arriba año abajo) y descubrí que este deporte no se me daba mal. Pasados los años, incorporé otro deporte a mi vida, eskupelota o pelota vasca. Llevaba en paralelo los dos deportes, la natación y la eskupelota, aunque los sábados era un poco muerte, por la mañana competición de natación y por la tarde partido de eskupelota.

Como a todos los chavales, un día me dio la neura del futbol, y junto con mis amigos de aquel entonces nos apuntamos al equipo local de mi pueblo, Usansolo, el Umore-Ona. Haciendo ya tres deportes, me era imposible compaginarlo todo, y aunque al principio hacia el esfuerzo de tirar para adelante, al final tuve que centrarme en un solo deporte, y erróneamente me quede con el futbol. A quien voy a mentir, era un paquete!!

Pasados los años, con 14 años, me empecé a introducir en el mundo de la música. Empecé a tocar la guitarra y deje de lado el deporte. Tuve varios grupos, pero ninguno llego a nada realmente.

Ya con 21 años, decidí que ya era hora de sacarme el carnet de conducir (si, lo saqué tarde) y fue entonces cuando todo dio un giro de 180 grados. Al principio, simplemente por hacer algo, empecé a ir a la piscina antes de montar en el coche de las prácticas de la autoescuela. Empecé a hacer 20 largos las primeras semanas. De 20 pasé a 40, de 40 a 60 y así sucesivamente. Para cuando me di cuenta era capaz de nadar 3km seguidos.  ¿Puede ser que mi cuerpo recordara como nadar gracias a todos los años que pasé compitiendo y que por eso mejorará tanto? 

Entonces, un compañero de clase de la universidad, que hacía travesías de natación, me habló de una página web (www.todonatacion.com) de la que conseguí mis primeros entrenamientos con el fin de hacer alguna travesía de natación. Los entrenos iban y venían, y yo lo cumplía todo a rajatabla. Ya teniendo un mejor físico, pensé que sería bueno complementar los entrenos de natación con entrenos de carrera a pie. Esto me planta en la primera carrera popular de mi vida, la Herri Krosa de Bilbao de 2012 (10km). Pude hacerla a menos de 5min/km, consiguiendo un tiempo total de 49 minutos con el que estuve muy satisfecho, y esto ya dejó dentro de mí un gusanillo que me tentaba a probar más carreras.

Mediante un compañero de clase en la universidad, me planteo la idea de hacer un triatlón. Este compañero me puso en contacto con un amigo suyo, y ahora mío también, Unai  Nieto, quien se convirtió en mi primer mentor. Gracias a él, puede realizar mis primeros triatlones, uno de distancia sprint en Somo y otro de distancia Olímpica en Castro Urdiales. En ambos terminé mejor que la mitad de la tabla.

Para el siguiente año, me puse más en serio y el objetivo ya no era poder acabar, sino hacer tiempos medianamente buenos. Para ello me puse a entrenar bajos las órdenes de mi actual entrenador, Gorka Bizkarra. Gracias a él este años he disputado los primeros puestos de la categoría Sub23 en distancias Sprint y Olímpicas.

¿Qué deparará el futuro? Eso nadie lo sabe, pero estoy seguro de que con trabajo duro y sacrificio todo es posible.